La Magia de la Vida


Título: La Magia de la Vida
Autor: Viviana Rivero
Editorial: EMECÉ (Planeta)
Páginas: 457

Hola chicos, ¿Qué tal su semana? bueno pues hoy les traigo una de las lecturas que quería leer este verano y venía postergando desde hace varios meses, y es, como ya vieron en el título, La Magia de la Vida, de Viviana Rivero. Espero disfruten esta reseña.

Sinopsis.
Emilia Fernán, joven periodista argentina,viaja a Florencia para escribir una serie de artículos sobre comida europea y, de paso, aliviar la pena por la partida de su novio Manuel. Allí deberá cumplir con un pedido de su padre: encontrar alguna pista que los conduzca hasta el cuadro perdido del maestro Camilo Fiore.
Mientras descubre los placeres de la comida italiana y sale en busca de la pintura. Emilia conoce a Fedele, el atractivo dueño del restaurante Buon Giorno, que la hará vivir un amor como nunca soñó. Los hilos invisibles que atraviesan la existencia terminarán llevánd
olos hasta un castillo en Piacenza, propiedad de un viejo conde que guarda secretos ocultos desde la Segunda Guerra Mundial y que estará mas unido a ellos de lo que creía.
Viviana Rivero construye una trama apasionante que viaja en el tiempo desde la actualidad hasta los años cincuenta, y cruza los destinos de varias familias en dos continentes. Es el relato de un amor único que, al sortear los desafíos que le impone la suerte, va desentrañando la madeja de una antigua historia de traiciones con un final inesperado.

"A ella la había traído el destino, ese al que le gustaba hacer juegos ininteligibles con los seres humanos. Muchas veces salían mal; pero cuando salían bien, eran maravillosos y hacían que todas las penas... valieran la pena"


Opinión.

Emilia es una chica argentina, periodista, reside en Buenos Aires y tiene un novio a quien ama, Manuel. Aparentemente siente que tiene una vida lo suficientemente estable, hasta que, tras una discusión con Manuel, siente que todo se viene abajo. Manuel, con quien tiene una relación de 3 años, le informa una tarde que le han dado una beca en Arizona y debía partir en una semana cuando mucho y estaría fuera seis meses. La noticia le cae como balde de agua fría a Emilia ya que no sabía nada de la beca y por supuesto se da cuenta que, a pesar que ella ha rechazado oportunidades en el extranjero por Manuel, ella no es una prioridad.

Cuando Manuel parte, se va bajo el entendido que ellos se darían un tiempo para pensar el futuro de la relación... si es que existía. En ese momento de como caída del cielo llega su mejor amiga, Sofía, informándole que la revista le iba ofrecer hacer una serie de reportajes culinarios en Italia y España; lo cual sería el pretexto perfecto para alejarse de todo lo que le recuerde a Manuel y mantenerse ocupada.

Al momento que Emilia le cuenta a su padre la noticia, le pide ir en busca de las pistas de un retrato sumamente valioso para su historia familiar. El cuadro era un retrato de su bisabuela y había sido pintado por Camilo  Fiore, su bisabuelo. Su padre conservaba el hecho por Gina, pintando a Camilo. Eran unos retratos, aunque separados, se habían hecho para permanecer juntos en la eternidad, este será el leitmotiv de la historia.

Emilia llega a Florencia y siguiendo las pocas pistas del cuadro llega al restaurante Buon Giorno, donde conoce a Fedele, un atractivo y alto italiano, pero todo se frena al enterarse que estaba embarazada de Manuel, quien al enterarse la idea le pareció todo menos alegre. 

"Buscando la meta nos habíamos perdido el camino"

Paralelamente la autora nos traslada en el tiempo entre los años 40, 50 y 60´s donde conocemos la dolorosa vida de Benito Berni, como las traiciones de un compatriota allegado a su familia lo dejó solo a sus nueve años, pasando su décimo cumpleaños escondido, traumados, sin comer y totalmente fracturado sentimentalmente. Lo único que le queda, años mas tarde, es recuperar las propiedades  y obras de arte familiares y emprender una una búsqueda de venganza a quienes tanto daño le hicieron.

La novela es contada en tercera persona, como un espectador invisible que de momentos hace pausa en la historia y le hace zoom a los pequeños detalles y te hace alejarte para que veas otros. Vamos de la mano de Emilia recorriendo italia, sintiendo el sol y la brisa, oliendo las pastas, salsas, pizzas, los jazmines; al mismo tiempo podemos sentirnos en un frío castillo lleno de obras de arte. 

Esta novela nos muestra las dos caras de la vida, las alegrías y las tristezas pero que en conjunto eso era vivir y debes hacerlo con pasión y disfrutar, agradecer cada cosa que tengas, cada persona a tu al rededor, siempre aceptar lo que se te da y lo que se te quita. 
A mi la novela me ha gustado muchísimo, ya necesitaba algo así, después de leer varios libros un tanto tristes y pesimistas, esta novela ha sido una bocanada de aire fresco.

Aunque debo confesar la que la historia secundaria (la de Benito), me gustó mas que la historia de Emilia, que se me hizo un tanto abrupta, el enamoramiento sucede, como en muchas novelas de éste tipo, en un lapso corto de tiempo y sin mucho detalle al inicio. Pero bueno esa ya es una opinión muy personal, ya que no soy muy aficionada al Romanticismo.

La autora me transportó por Italia de una manera increíble, realmente sentía que comía pasta (confieso que lo tuve que hacer), sentía el sol Italiano, caminaba por sus calles y vivía las preocupaciones de Emilia, el amor de Federe y el dolor de Benito. Espero puedan darle una oportunidad a esta novela, que a mi me ha dejado un buen sabor de boca.





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